ROL DEL CONTADOR.
A simple vista, un contador simplemente se sienta frente a su escritorio para revisar facturas, estados de cuenta, nóminas, cheques, órdenes de compra y solicitudes de pago.
Los papeles se encuentran esparcidos sobre su escritorio y los documentos están abiertos al mismo tiempo en la pantalla de su computadora.
Entre sus tareas está la preparación de estados financieros, los balances de ganancias y pérdidas, y la contabilidad general de una empresa, institución o particulares.
Sin embargo, su impacto en la sociedad tiene un alcance que va más allá del edificio donde trabaja, más allá de la cartera de un cliente físico o moral.
Las propuestas antes mencionadas son iniciativas y movimientos que se pueden añadir al papel del contador en la sociedad.
De todos modos, por sí solo el contador ya ocupa un lugar fundamental en organizaciones públicas, privadas y sociales.
Día a día, con ética y compromiso social, las actividades que realiza un contador le dotan de un rol crucial en la sociedad: generar información financiera para proveedores, inversionistas, autoridades fiscales, trabajadores, directivos y otros.
En diferentes niveles, permite el correcto funcionamiento de cada organización al mantener sus finanzas en un funcionamiento adecuado.
A su vez, este correcto funcionamiento impacta en la economía de la comunidad, del estado y de todo el país.
Así, el contador se convierte en un guía dentro de áreas directivas y operativas del sector financiero, al desempeñarse como asesor de negocios, especialista contable o consultor de empresas.
Su trabajo es importante para que las organizaciones y personas tomen decisiones acertadas sobre su patrimonio, bienes y propiedad financiera.
El papel clave de un contador en la sociedad se aprecia en diferentes esferas. Es el doctor en las finanzas de una persona que busca facturar y deducir impuestos cada quincena.
El guía de los inversionistas y los emprendedores, el vigilante de la estructura financiera de una organización, el enlace financiero entre una empresa y los trabajadores.
De manera que es un elemento necesario para mantener las finanzas saludables de un país, entendiéndolo al país como la totalidad de aquellas realidades particulares.
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